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Cuecen a presión productos tales como frijol, garbanzo y lenteja, para la elaboración de sopas y guisados. Se utilizan también para preparar cebolla en aceite para conservas de vegetales en escabeche, entre otros productos.
Eliminan el agua de frutas y verduras tales como mango, durazno, manzana, piña, plátano, papaya, fresa, ciruela, nopal, chile y jitomate, así como de algunas hierbas y flores, para la elaboración de dulces, botanas y condimentos.
Aplican agua caliente o vapor de agua a toda clase de frutas y verduras, para reafirmar su color, reducir la presencia de microorganismos y retardar el daño enzimático. Se utilizan también para ablandar frutas como el mango, facilitando su pelado y despulpado, e incluso para pelar con sosa cáustica frutas como durazno y chabacano.
Eliminan el agua de productos líquidos y semilíquidos, obteniendo concentrados para preparar jugos, néctares, purés, dulces, jarabes y salsas, entre otros.
Fríen sumergiendo en aceite caliente productos de harina de maíz y trigo, así como algunas frutas y verduras, obteniendo frituras para preparar sopas, condimentos y botanas.
Calientan toda clase de productos líquidos y semilíquidos para preparar mermeladas, ates, jarabes, sopas, guisados y salsas, entre muchos otros. Se utilizan también para escaldar frutas y verduras, así como para facilitar su pelado.
Queman ligeramente la capa exterior de vegetales tales como cebolla, chile y tomate, para su uso en la elaboración de salsas y otros productos.
Cambian por vapor de agua el aire atrapado en envases llenos con frutas y verduras antes de ser cerrados, generando un vacío en su interior, para reducir la presencia de microorganismos y dar al producto mayor vida de anaquel.